

Starfish Technologies está a punto de lanzar sus primeros chips, lo que marca un cambio en la intersección entre neurociencia, medicina y tecnología. Aunque el control de videojuegos con la mente sigue siendo una prioridad baja, la promesa inmediata de la tecnología de interfaz cerebro-computadora radica en su potencial para transformar diferentes áreas. La resolución del título es que la tecnología de interfaz cerebro-computadora tiene el potencial de revolucionar diversos campos, como la medicina, la neurociencia y la tecnología, abriendo nuevas posibilidades y aplicaciones en el futuro cercano.