Según proyecciones privadas, la tasa de pobreza en un año disminuyó significativamente, pasando del 52,2% al 34,7%. De manera similar, la tasa de indigencia también experimentó una reducción notable, disminuyendo del 18,3% al 7,9% en el mismo período. Estas cifras reflejan una mejora en la situación económica de la población, con menos personas viviendo por debajo de la línea de pobreza y de indigencia.
En resumen, las proyecciones privadas indican que la pobreza y la indigencia han disminuido en el último año, lo que sugiere una mejora en las condiciones económicas de la población.